Extracto del artículo
“La
farsa y la tragedia bailan juntas” de Marcos Aguinis publicado en la
Nación 03/10/2014.
“...Hablando
de buitres, circula por Internet una descripción que me limito a reproducir:
"Adueñarse de 28 casas en Santa Cruz mediante la 1050 es de buitres.
Comprar tierras fiscales a sumas ridículas por el privilegio de tener el poder
por el mango es de buitres. Cambiar billetes argentinos por dos millones de
dólares el día previo a la devaluación ordenada por la esposa-Presidenta es de
buitres. Incrementar el patrimonio personal en la cifra alucinante de 1600% es
de buitres. Haber dejado empeorar la educación, la salud, la pobreza, la
delincuencia y facilitar el incremento feroz del narcotráfico es de
buitres".
Según el relato, los
ladrones del presente no son tales, sino víctimas del neoliberalismo que rigió
en los 90, que no tenía lazos de parentesco con el peronismo en general ni los
incontables funcionarios de la actual gestión "exitosa". Por eso un alumno que desea
abandonar la escuela merece aplausos, porque denuncia con su actitud al mal
docente que lo aplazó por negarse a estudiar. El mérito es cosa de burgueses,
de liberales, de oligarcas; lo que vale, en cambio, es el desmérito, que suena
a revolución. Mucha farsa, desde luego,
pero envenenada de tragedia. O, dicho mejor, una tragedia que veremos con
mejores luces y colores más hirientes en el futuro próximo.
Sin
pensarlo demasiado, se compara la riqueza petrolífera argentina con la de
Arabia. Y se las homologa sin sonrojo, pese a que se trata de yacimientos que
requieren diferentes montos de inversión. Esas inversiones no vendrán ni
"ebrias ni dormidas" mientras siga rigiendo la actual inseguridad
jurídica. Mientras, pagamos a Qatar y Bolivia por un gas que podríamos producir
por una mínima fracción de lo que desembolsamos con nuestra gestión nacional y
popular. La culpa de esta situación no
la tienen, ni por asomo, quienes manejan el Estado. Deben de ser Obama, Merkel,
los terroristas.
El Estado ya ni se
sabe qué es. Por lo pronto, hay una cabeza homologable a Luis XIV, porque, sin
decirlo, es Ella. El Estado es Cristina Fernández de Kirchner. Hace lo que se
le ocurre, no rinde cuentas de nada y apenas consulta con quienes le dicen sólo
aquello que le acaricia el narcisismo....”
Los conductores del
programa República Indefensa en se edición N° 23 por el canal TLV1, Emilio
Nani, Guillermo Camposy Jorge Mones Ruiz, comentan las
últimas actividades y las delirantes declaraciones de la presidente Fernández de Kirchner. Los nuevos hechos producidos en
esta semana que hicieron temblar el tablero político, como ser amenazas de
atentados (ISIS un día, Yanquis otro, peleas con EEUU, fondos
"buitres", corporaciones nacionales, sojeros, conspiraciones
nacionales e internacionales, el reemplazo del presidente del Banco Central, el
protagonismo de La Cámpora, etc.) parecen jalonar el camino de la Argentina
hacia un caos o colapso del estado.
Mi padre, Jaime Smart, que está preso en Marcos Paz, cumplió ayer 79 años. Como
no tengo forma de hablar con él, por este medio quisiera hacerle llegar mi
saludo:
“Sé
que justo el día de tu cumpleaños tuviste que ir a juicio a La Plata. Tus
nietos están muy bien, por suerte se van al colegio en bicicleta, salen los
fines de semana caminando, se juntan con los amigos en la calle y viven muy
tranquilos. El otro día el menor tuvo un pequeño accidente con la bici,
necesitó una sutura y en un hospital público no estuvimos más de 40 minutos. En
el apuro dejé las llaves puestas del auto y nadie se lo llevó, increíble lo que
es el Primer Mundo. En el colegio, Nacho está estudiando las dictaduras en
América latina, pobres, qué confundidos que están. Creen que las organizaciones
guerrilleras tuvieron mucha responsabilidad y que no eran jóvenes idealistas.
Yo
sigo trabajando en una empresa que no para de crecer; se están haciendo muchas
inversiones mirando hacia 2020. El otro día recibí una notificación del Banco
de Previsión Social: me habían descontado más plata de la que debían y me la
devuelven. Con esto pienso cruzar el charco y visitarte. Los compañeros
charrúas te mandan un fuerte abrazo. Espero que andes bien, feliz cumpleaños.
Tu hijo menor.”
PD: me olvidaba de
decirte que, como acá están “embuchados
de dólares”, me dan un crédito muy accesible para comprarme una casa.
Miguel Ángel Paiva nació en la ciudad de Buenos Aires
el 31 de Mayo de 1941, ingresó al Colegio Militar De La Nación el 19 de
febrero de 1958 y egresó el 22 de diciembre de 1964 con el grado de subteniente
en el arma de Infantería. Su último
destino en el Ejército Argentino fue
la Escuela Superior de Guerra en calidad de alumno.
Paiva, que tenía la especialidad de paracaidista, salió de su domicilio en la
ciudad de Buenos Aires el 2 de octubre de 1974 poco después de las 7 horas para
tomar el colectivo que lo conduciría a la Escuela cuando desde un grupo de 3
personas le dispararon con un arma automática hiriéndole de muerte y luego
huyeron en un automóvil conducido por una mujer que les aguardaba en las
inmediaciones.
Miguel Ángel Paiva, que estaba casado y tenía cuatro
hijos, fue ascendido post mortem al grado de mayor y en su homenaje una calle
del Barrio Ciudad del Milagro de la ciudad de Salta lleva el nombre de capitán Miguel Ángel Paiva.
Los diarios del día siguiente del hecho publicaron la noticia en forma
destacada: Clarín tituló en su primera página: “Asesinaron en Palermo al Capitán
Miguel Paiva” y La Prensa,
también en la primera página tenía el titular “Asesinaron a balazos al capitán
Miguel A. Paiva”.
Por su parte el Ejército
Revolucionario del Pueblo publicó en
la página 18 del N° 43 de su órgano de prensa Estrella Roja del 4 de noviembre de 1974, bajo el título Crónica de la Guerra Revolucionaria,
correspondiente a las acciones del mes de octubre: “Día 2, Buenos Aires. El ERP
ejecutó al Capitán del Ejército contrarrevolucionario Miguel Ángel Paiva”.
(Jóvenes idealistas les dicen ahora a sus
asesinos)
Varios juristas
analizaron los casos en que el juez no trabaja para encontrar la verdad
Crédito: Adrián Escandar
Los juristas Federico
Morgenstern y Guillermo Orce presentaron este lunes por la noche su libro Cosa
juzgada fraudulenta. Dos ensayos sobre la llamada cosa juzgada írrita. En una
conferencia junto a varios invitados analizaron la posibilidad de reabrir
causas judiciales que cerraron de forma fraudulenta, tema sobre el que hay
posiciones dispares.
Cuando una causa está
cerrada, se la considera "cosa juzgada", lo que implica que no se
puede volver a debatir en sede judicial, salvo en determinados casos muy
puntuales. No obstante, existe lo que se conoce como "cosa juzgada
írrita", que se produce cuando se arriba a una decisión de manera
fraudulenta, por ejemplo, cuando el juez no busca la verdad.
Morgenstern, investigador
adjunto de la Universidad de San Andrés, está a favor de reabrir este tipo de
causas, sobre todo en casos de corrupción, en los que consideró que sería
"más probable que prospere".
"Creo que a
diferencia de otras iniciativas como la Conadep contra la corrupción, la cosa
juzgada fraudulenta, cuando corresponde, no alegremente, es algo concreto y
correcto, que no implica juguetear con las instituciones, ni requiere cambiar
leyes, remover a nadie de su función ni armar una comisión de notables. La cosa
juzgada írrita puede también aplicarse en casos de violaciones y crímenes de
lesa humanidad. Creo que hay un terreno fértil, no es tan solo para un
delito", sostuvo.
"Me preguntaron
si escribí este libro especialmente para rever el sobreseimiento de la
Presidenta (Cristina Kirchner) dictado por (el juez federal, Norberto) Oyarbide
en el tema del enriquecimiento ilícito. No conozco la causa, no estoy en
condiciones de contestar sobre eso y tampoco me corresponde. Ojalá el tema
tenga repercusiones judiciales o al menos pasen cosas", advirtió. Y
aventuró que el tema "se va a debatir en serio este año o el que
viene".
En la otra vereda,
Orce dijo que tiene "un concepto más restrictivo a la hora de rever la
cosa juzgada". Y explicó: "Si existe esta concepción significa que en
algún momento hay que dejar de discutir un tema. La cosa juzgada debe subsistir
con independencia de su correspondencia con la verdad y una sentencia puede ser
justa aunque no sea en un sentido relevante verdadera".
"En algún
momento debemos aplicar la cosa juzgada y terminar de discutir el tema. De lo
contrario, nunca dejamos de molestar a una persona que estuvo imputada. Hay que
aceptar que si existe un valor de la discusión es que puede terminar mal desde
nuestro punto de vista y el de nuestros intereses", insistió.
La conferencia
"Herramientas contra la corrupción" fue realizada a anoche en el
British Arts Centre (BAC), en el centro porteño, y hubo otros expositores
además de los autores del libro.
El director del
Departamento de Derecho de San Andrés, Lucas Grosman, apoyó la posición de
Morgenstern. "Que un juicio no haya encontrado la verdad no basta para
poder reabrirlo, pero el problema es cuando el juez nunca trabajó para
encontrar la verdad. Este el caso que nos debería preocupar", sostuvo. Y
evaluó: "Existe el riesgo de que los actos de corrupción realizados por
quienes, en el momento que sea, se encuentran en el poder sean jugados de una
manera que no se procure analizar realmente si cometieron un delito, sino que
el juicio sea una puesta en escena para tener una sentencia absolutoria que
blinde al acusado frente a futuras investigaciones".
En sintonía, el
profesor de la Universidad de Buenos Aires Agustín Zbar reforzó ese argumento.
"Hay derecho a ser eximido de culpa, pero no en una pantomima orquestada
para beneficiar a un imputado que eligió la partitura que van a tocar en ese
proceso, burlándose de todos los que respetan la Justicia", observó.
Cristina Kirchner no
se guardó nada en sus dos presentaciones en las Naciones Unidas y dejó más
claro que nunca dónde quiere ser vista y hacia dónde va su gestión en sus últimos
tramos.
Sus discursos fueron
claros y punzantes y se desplegaron en tres ejes: reafirmar el rumbo del
Gobierno, enfrentarse una vez más con Estados Unidos para potenciar el lugar de
la Argentina como víctima de la avaricia del capitalismo internacional y
destacar que tiene el apoyo de su amigo el Papa, que la empoderó al invitarla a
comer en el Vaticano antes de su viaje a Nueva York.
El miércoles, Cristina habló en el Consejo de Seguridad de la ONUante la mirada de Obama. Foto: Archivo
Los dos primeros
pilares no sorprenden por habituales desde que la Corte de Estados Unidos dejó
a la Argentina al borde del default al no tomar el caso de los holdouts y
desbarató los únicos planes que el Gobierno tenía para retirarse con una buena
cuota de poder sobre la base de una economía si no saludable, al menos no tan
vulnerable como ahora. Si no se gana, la tribuna exige, al menos, jueguito y
fantasía que vistan las derrotas. Cristina cumplió: lanzó fuegos de artificio
dialécticos y alimentó la fantasía.
La novedad radica en
la pata romana de su trípode argumental y da lugar a algunas preguntas que ni
el gobierno argentino ni el Vaticano han dilucidado.
¿Francisco comparte
las duras críticas, sospechas, conjeturas e ironías de la Presidenta sobre la
ofensiva de Estados Unidos contra Estado Islámico?
La más relevante de
estas cuestiones radica en saber si Francisco comparte las posiciones
sostenidas por la Presidenta en la ONU. En particular, las duras críticas,
sospechas, conjeturas e ironías referidas a la ofensiva de Estados Unidos
contra Estado Islámico (EI).
El asunto cobra
relevancia en tanto el Papa ha expresado reiteradamente su preocupación por la
persecución y matanza indiscriminada de cristianos por parte de EI, condenó las
brutales acciones de los jihadistas y dio un virtual respaldo a una acción
militar para poner freno a este nuevo (y más cruento que nunca) flagelo
fundamentalista.
Cristina Kirchner
visitó el sábado pasado al Papa junto al diputado Andrés Larroque y otros
referentes de La Cámpora. Foto: Archivo
De esta incógnita se
desprenden otras, entre las que no se cuenta, obviamente, cuál es la opinión de
Francisco respecto de lo que opina Cristina sobre el sistema financiero
internacional. Es público que comparten puntos de vista.
Menos claro está si
el Papa evaluó cuánto sería invocado a modo de escudo. Dadas su sabiduría, su
perspicacia política y su conocimiento profundo de la Presidenta en particular
y del peronismo en general cabe presumir que lo previó. En tal caso, la
pregunta que se impone es qué cálculos de costo y beneficio para sí, para la
Iglesia y para la Argentina hizo cuando decidió darle sostén simbólico a la estrategia
presidencial.
A nadie escapa que la
estrategia oficialista tiene por objetivo primordial la recuperación de oxígeno
político para poder seguir siendo un actor político determinante en lo que
resta del mandato, convertirse en un elector calificado en la carrera
presidencial y condicionar al próximo presidente. Para eso ha optado por
valerse del kirchnerismo más duro, representado por La Cámpora, que hegemonizó
la comitiva presidencial y tuvo un protagonismo excluyente en el Vaticano con
el beneplácito de Francisco.
¿Qué cálculos de
costo y beneficio para sí, para la Iglesia y para la Argentina hizo el Papa
cuando decidió darle sostén simbólico a la estrategia presidencial?
Por eso, a los
referentes opositores les cuesta encontrar respuestas para el espaldarazo papal
justo una semana después de la presentación en sociedad del hijo presidencial y
líder camporista, que alteró la agenda política nacional, y en los prolegómenos
del previsible despliegue escénico de la Presidenta en la ONU.
Se les hace difícil
creer que el Papa haya dado tanto de sí en favor de Cristina por temor a un
eventual fin de ciclo turbulento, como se ha dicho, cuando en las últimas
semanas el oficialismo dio muestras elocuentes de no haber perdido en nada la
iniciativa política, sancionó toda ley que se propuso y sigue impertérrito en
su avance sobre la Justicia. Aunque la inflación y el dólar siguen indomables,
pero eso dicen que no les preocupa.
Máximo Kirchner
encabezó un acto hace dos semanas y recuperó la iniciativa política del
oficialismo. Foto: Archivo
Los opositores más
devotos prefieren creer que si no hubiera sido por el Papa todo sería peor. Los
más pragmáticos aducen que el Vaticano buscó evitar cualquier sorpresa contra
el dogma en la urgente sanción del Código Civil que se propone lograr el
oficialismo. Y muchos, desconcertados y expectantes, optan por la máxima que
dice que los designios de Dios son inescrutables.
De lo que ninguno
tiene duda es que el kirchnerismo salió manifiestamente fortalecido del viaje
al Vaticano y que está decidido a explotarlo en su beneficio. Pero no dejan de
preguntarse qué dirá de todo eso el Santo Padre que vive en Roma, como les
gustaba cantar a los auténticos setentistas.
Por Claudio Jacquelin
para LA NACION, viernes 26 de septiembre de 2014.
FUENTE:
* 1 8 1 0 – BICENTENARIO – 2 0 1 0 * POR UNA MEJORARGENTINA PARA RECUPERAR LA
PATRIA PARA RECUPERAR LA REPÚBLICA. Año 6
Nº 216
Es probable que
algunos se sientan ofendidos, o al menos, dolidos por lo que he escrito.
Escrito del cual me hago responsable en un todo.
No soy -esto sería un
pecado de presunción- un católico perfecto. Soy, solo un pecador en el que se
dan cita muchas veces, más de lo que me gustaría, la ira y la soberbia entre
otros pecados. Pero digo lo que digo porque me siento una oveja sin guía.
Porque siento que aquellos a quienes Dios Nuestro Señor pensó como pastores han
aceptado ser simplemente asalariados que no responsables del rebaño.
Quien crea que lo
escrito, a pesar de su dureza, puede ayudarle a quienes dirigen la Iglesia a
que las palabras que son la esencia de lo que pedimos en la Oración por la
Patria no sean solo palabras sino el ruego diario al Señor para que nos de
fuerzas para construir una nación sin exclusión, sin hambre, con trabajo y que
por sobre todo la lucha por el bien común sea lo que nos mueva para que todos
sepamos que hay un futuro, le agradecería que lo divulgaran.
A quienes se sientan
agraviados por lo escrito les pido con toda humildad, perdón
La descripción que el
columnista hace del funcionamiento actual de la justicia en particular y de las
instituciones en general… nos mueve a reflexionar sobre el gran daño físico y
moral que se cometió y se comete a diario en contra de todos los soldados,
policías, gendarmes, prefectos y civiles que en los años ’70 combatieron al
violento terrorismo que tenía como objetivo hacerse del poder para imponer un
sistema marxista-cubano y soviético. Los mal llamados juicios de lesa humanidad
son una farsa y una ofensa para la república. Están viciados de nulidad absoluta
y sin ninguna duda, el próximo gobierno deberá solucionar ese grave problema.
Sinceramente,
Pacificación
Nacional Definitiva
por
una Nueva Década en Paz y para Siempre
SIN
DECISIÓN POLÍTICA NO CESARÁ LA CORRUPCIÓN
Por Hugo Alconada Mon
| LA NACION
Foto: LA NACION
Primer acto. El juez
y el periodista conversan en el despacho del juez. La secretaria del juez entra
de improviso. Le informa que llama el operador. El juez, que estaba sentado, se
pone de pie nada más que para atender esa llamada. Cual sargento ante la
irrupción de su general.
Segundo acto. Semanas
después, el operador y el periodista coinciden en la puerta del despacho del
mismo juez. El operador sale; el periodista pensaba entrar, pero opta por
dialogar con el operador. El operador le anticipa que en tres meses el juez
cerrará "la" causa penal.
Tercer acto. Tres
meses después, en efecto, el juez sobresee a los acusados. Los fiscales no
apelan. Se cierra la causa -fina ironía- el Día de los Santos Inocentes.
Esto que cuento
sucedió. Me sucedió. Es apenas una muestra de un amplio abanico similar, que
resulta imposible denunciar sin más pruebas que los ojos y oídos del
periodista. Conozco fiscales a los que, para apretarlos, les han enviado fotos
suyas con alguna amante. Jueces que han llorado delante de mí. Testigos a los
que les han puesto un revólver en el pecho para que callen.
Peritos que han
firmado dictámenes falsos, por apriete o por dinero.
También conozco
muchos funcionarios políticos honestos. Pero, acaso por cuestiones de mi
trabajo, conozco muchos de los otros. De los que a la hora de pedir coimas ya
calculan cuánto de ese dinero negro deberían destinar al abogado, al fiscal y
al juez si el negociado saliera a la luz y afrontaran una investigación penal.
Que más que investigación será, por tanto, una parodia.
Hay muchos jueces y
fiscales probos y dignos. Pero también hay de los otros, de los que hasta
mandan señales de complicidad a los acusados mediante el color de las corbatas
que usan. O por la mano en que llevan el teléfono celular. O un prendedor en la
solapa del saco. Todas señales preestablecidas por el enlace en las sombras
para que el acusado al que le han pedido "que
se ponga" sepa que el requirente no vende humo, sino que es,
efectivamente, un emisario de Su Señoría.
Y así, mientras la
Justicia es una dama vendada e inflexible para los ladrones de gallinas, se
hinca ante los grandes tiburones. Sean funcionarios, empresarios o
sindicalistas. O lo que fuere. Porque lo que importa es la billetera,
rebosante, para comprar (o alquilar) voluntades.
Así las cosas, ¿no
hay nada que hacer? ¿Bajamos la persiana y sálvese quien pueda o tenga los
billetes? ¿Es acaso tan difícil revertir o corregir este panorama?
Por lo pronto, hay
quienes incluso consideran necesario impulsar una Conadep de la corrupción
post-2015. Hay varios grupos trabajando en esa línea desde hace meses. El
desafío para quienes adscriben a esa idea es determinar si quienes vendrán
después serán distintos, mejores que los que están, o si sólo utilizarán esa
Conadep para lo que en verdad sería una cacería de brujas con fines
partidarios.
Por mi parte,
prefiero pensar en los actuales (y futuros) funcionarios como personas que sólo
refrendan con sus acciones un aforismo. Ese que dice que "el poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe
absolutamente". Si es así, entonces el camino quizá pase por
restablecer los contrapesos, filtros y controles que fiscalizan al poder.
Hay instituciones que
hoy son apenas una sombra de lo que fueron o de lo que pueden y deben ser.
Entre otras, la Oficina Anticorrupción, la Fiscalía de Investigaciones
Administrativas, la Sindicatura General, la Auditoría General, el Consejo de la
Magistratura. Y no es necesario impulsar reformas legislativas. Basta con
inyectarles a esos organismos personal y presupuesto, y refrendarlo luego con
el ingrediente clave: decisión política.
Esa decisión, bien
explicitada, daría una clara señal hacia adelante. ¿Cuál? Que la corporación
político-empresarial (que excede a este gobierno) no degollará al juez, fiscal
o funcionario de esos organismos de control que ose investigarlos. Porque
durante los últimos 20 años sobraron las muestras en contrario.
La duda es obvia.
¿Querrán eso quienes asumirán en 2015? ¿O el próximo presidente preferirá
beneficiarse del statu quo que pasará a acatar sus designios discrecionales
-contra quien sea- en cuanto agarre el bastón de mando?
Porque el riesgo de
impulsar la senda institucional, fortalecer los órganos de control y potenciar
a jueces y fiscales es evidente. El próximo gobierno perdería la facultad de
hacer y deshacer lo que le plazca, sin pruritos por ese estorbo llamado "ley" o "Constitución nacional". Seguir esa senda implicaría
abrir una verdadera caja de Pandora: un Poder Judicial, al fin, independiente.
¿Por qué una caja de
Pandora? Porque existiría la posibilidad, por ejemplo, de reabrir expedientes
penales cerrados tras investigaciones que fueron una farsa. A eso apunta Cosa
juzgada fraudulenta, el libro que acaban de publicar dos penalistas, Federico
Morgenstern y Guillermo Orce.
"La
sociedad verá los tribunales como sesgados, deshonestos y parciales si percibe
que los juicios farsescos son inalterables, si se respeta la firmeza de las
absoluciones obtenidas tras un procedimiento espurio y si, por la inacción
deliberada de un funcionario judicial, no se logra condenar a quien se sabe que
cometió un delito", argumenta uno de los autores
para fundamentar que la Justicia logre al fin que ciertos sobreseimientos "truchos" sean revisados.
Morgenstern recurre
al lenguaje futbolero para explicarlo: "Si
la cancha está inclinada, el triunfo no es digno, pero si existió una
simulación en la que el proceso judicial fue orientado al otorgamiento de un
bill de indemnidad contrario a los principios del sistema republicano, entonces
ni siquiera hubo un partido".
El libro promete
levantar polvareda porque se mete con una de las vacas sagradas del derecho
penal: ¿es posible relativizar el sacrosanto principio del non bis in ídem (no
se puede juzgar dos veces por el mismo hecho), aun en investigaciones
sospechadas de terminar en sobreseimientos debido a corrupción del juez o los
aprietes del poder?
Eso es, sin vueltas,
lo que ocurrió en varios expedientes que se cerraron durante las últimas
décadas. Causas en las que ni siquiera llegó a jugarse el partido de la investigación,
ni el de los controles previos ni posteriores, debido a la corrupción
desenfrenada de funcionarios y empresarios.
Insisto: ¿estarán
dispuestos quienes lleguen en 2015 a fortalecer las instituciones, los órganos
de control y el Poder Judicial, lo que implicaría una verdadera (y muy
concreta) política de Estado? ¿O se limitarán a repetir frases tan marketineras
como vacías durante la campaña?
Como dijo el papa
Francisco en una homilía reciente, hay que esperar contra toda esperanza. Pero
dependerá de la sociedad. Porque el que no llora, no mama. Y si los ciudadanos
no les exigimos a los candidatos terminar con la impunidad, ellos van a
preferir seguir como hasta ahora, con la comodidad del statu quo. O, como
máximo, les alcanzará con aplicar una dosis homeopática de gatopardismo.
Así, pues, de las
respuestas que como sociedad demos a esas preguntas dependerá que post-2015
haya un cuarto acto en la farsesca no-investigación que enjuagaron aquel juez y
aquel operador. Y para muchas, muchísimas otras no-investigaciones más.
El poder de turno ha
generado una enorme desunión y desencuentro social en la sociedad argentina,
ahora nos aísla del mundo occidental… justamente cuando necesitamos estar muy
unidos internamente y con nuestros tradicionales aliados.
Ni la presidente ni
el miope entorno que la acompaña, son capaces de discernir la grave amenaza que
la cultura islámica representa para la cultura occidental y particularmente
para la religión católica. A tal efecto les dejamos un vídeo de la Dra. Wafa Sultan, donde diserta sobre
su experiencia como mujer musulmana. Prestemos atención a su mensaje y tratemos
de cerrar filas con nuestros hermanos connacionales y amigo occidentales.
Hoy se cumple el
segundo aniversario del fallecimiento del señor Contraalmirante de IM VGM (RE) Don Carlos Alberto Busser, Preso
Político y héroe Veterano de Guerra de Malvinas. Ningún medio periodístico
destaca esta fecha de quién fuera el Comandante de la Fuerza de Desembarco de
la “Operación Rosario” y recuperara en forma incruenta la soberanía de las
Islas Malvinas.
Ese caballero del mar
murió en estado de Preso Político, sin condena alguna, el 29 de septiembre de
2014… pero su paso a la inmortalidad es anterior, se concretó el 2 de abril de
1982.
Con él, son ya 254 (doscientos
cincuenta y cuatro) los Camaradas fallecidos a la fecha, pertenecientes a todas
las Fuerzas Armadas, de Seguridad, Policiales y Penitenciarias; en el marco de
este proceso de persecución, teñido de incontables irregularidades jurídicas y
sistemática venganza.
Expresamos nuestro
sentido dolor… el soldado no muere, hasta que es olvidado por su Patria. Hoy no
solo se ha olvidado a un soldado, se ha olvidado a un héroe… quién deberá ser
rescatado del olvido por la historia.
Destacamos que un puñado de salteños, agrupados en la Asociación Civil "Centro de Estudios en Historia, Política y Derechos Humanos", nos hizo llegar su sentido homenaje al querido Almirante y que dejamos abajo de estas breves líneas.
Una vez más
levantamos nuestra voz hacia el poder de turno, no pueden continuar con esta
matanza selectiva… es su obligación como presidente de todos los argentinos
garantizar el debido proceso, la igualdad ante la ley y por sobre todo lograr
la unión de la sociedad para superar las antinomias que después de 202 años aún
nos mantienen divididos. Es hora de sin odios, ni venganzas, es hora de una
mirada superadora.
Sinceramente,
Pacificación
Nacional Definitiva
por un Nueva Década en Paz y para Siempre
Permiso Señor
Almirante Don Carlos Büsser:
El Pueblo de la
Nación Argentina empieza a entender, a partir de su desaparición física, que a
30 años de aquella gesta histórica las batallas más importantes en la vida, de
un Veterano de Guerra de Malvinas, son las que peleamos todavía, minuto a
minuto, , día a día en nuestra memoria y en el silencio de nuestras almas.
Un
VERDADERO SOLDADO DE LA PATRIA, MUERE, en la POBREZA, en el OLVIDO y en el
SILENCIO; y PERSEGUIDO.
Pues Señor Almirante,
prefiero morir así, porque sé que usted tiene el corazón lleno de Patria, a
pesar de todas las cosas que le hicieron.
¡Señor Almirante
Büsser, Que en Paz Descanse!
Suboficial
Primero (RE) VGM Juan Domingo Frías
29/09/2012
Uno de los tantos Soldados
Argentinos víctima de la venganza subversiva de los 70's; un proceso repleto de
irregularidades jurídicas, donde no se respetan los más mínimos Derechos
Humanos que tanto se predica, donde se sufre la falta de atención médica, el
abandono y el silencio de la sociedad, y la cobardía y des-profesionalismo en
un marco jurídico obsecuente e ignorante.
El Prócer Argentino
que comandó y dirigió la "Operación Virgen del Rosario", resultando
exitosa, y además siendo ovacionada por su perfección, murió en cautiverio como
Preso Político.
Un sencillo Homenaje
y eterno Agradecimiento del "Centro de Estudios en Historia, Política y Derechos
Humanos" de Salta, al: Contralmirante (RE) IM VGM Carlos Alberto Cesar
"Conejo" Büsser (q.e.p.d.); al cumplirse un nuevo aniversario de su
fallecimiento.
Que se extienda hacia
los 649 hombres caídos en Malvinas Argentinas, Veteranos de Guerra, Reservas y
Voluntarios; del Ejército Argentino, Armada de la República Argentina y Fuerza
Aérea Argentina.
GRACIAS
Recuerdo
del Almirante IM Carlos Büsser, por Oscar Dufour para el Informador Público
El 29 de septiembre
de 2012 fallecía, a los 84 años de edad, a causa de un infarto de miocardio, el
Almirante IM Carlos Büsser, uno de los héroes de la gesta histórica de
recuperación de nuestras Islas Malvinas, siendo en 1982 el Jefe de la llamada
“Operación Rosario”, como finalmente se denominó al desembarco argentino para
la toma de las Malvinas, que involucró a gran parte de la Armada Argentina.
En esa “operación” se
formaron entonces tres grupos diferentes, el primero incluía las unidades de
transporte; buque de desembarco de carros Q-42 ARA Cabo San Antonio,
rompehielos antártico Q-5 ARA Almirante Irízar y el transporte Isla de los
Estados. Junto a estos buques navegarían los destructores D-1 ARA Hércules y
D-2 ARA Santísima Trinidad, las corbetas P-1 ARA Drummond y P-3 ARA Granville y
el submarino S-12 ARA Santa Fe. Dando cobertura a estas unidades de
intervención se encontraban el portaaviones ARA 25 de Mayo, los destructores
D-27 ARA Comodoro Py, D-26 ARA Bouchard y D-29 ARA Piedra Buena y el petrolero
B-18 ARA Punta Médanos. En esta “operación” táctica intervinieron un total de
700 Infantes de Marina y 100 integrantes de fuerzas especiales.
Büsser se encontraba
al momento de su muerte cumpliendo arresto domiciliario, a la espera de un
“juicio” por su presunta participación en “delitos de lesa humanidad” en
ocasión de haber sido destinado en Bahía Blanca. Dos días después, fallece su
esposa y compañera de toda la vida Sra. Delia Niemitz de Büsser.
Les dejo a
continuación un fragmento fiel de la entrevista que concedió por escrito a la
“BBC” en español.
Fragmentos
de la entrevista que el Almirante IM Carlos Büsser concedió por escrito a la
BBC en español
“En las operaciones
anfibias, el día comienza en las últimas horas de la noche, cuando los hombres
se preparan para entrar en combate, desayunan, toman su armamento y se dirigen
a los lugares de embarco”, señaló el contraalmirante, refiriéndose al 1 de
abril de 1982, a pocas horas de producirse el asalto contra la capital del
archipiélago Port Stanley / Puerto Argentino.
Los Infantes de
Marina a su cargo -y otros efectivos del Ejército y la Armada- habían llegado a
la costa de las islas en dos buques de desembarco: el Cabo San Antonio y el
Santísima Trinidad. Además participaron el rompehielos Almirante Irizar y el
submarino Santa Fe.
En total, había
decenas de vehículos armados y cientos de efectivos, incluyendo unos 80
miembros de las fuerzas especiales.
“Durante la travesía
hacia las islas nos acompañó un fuerte temporal, casi hasta el momento de
llegar”.
“La masa de tropas en
el buque de desembarco de tanques del ARA Cabo San Antonio tenía experiencia en
ejercicios anfibios anteriores, de modo que su adaptación a las malas
condiciones del mar fue buena (…) En las horas previas a la operación todos se
veían muy tranquilos, concentrados en preparar el armamento y los jefes de fracciones
enfocados en sus planes y estudio de los objetivos”
Tras haber preparado
la maniobra numerosas veces con anterioridad, ya se sabía que una vez que se
diese la orden de embarco el personal sólo tardaría 18 minutos en estar listos
para desembarcar. Y así fue en la mañana del 2 de abril. (…)
La punta de lanza de
la operación fueron ocho buzos tácticos que salieron aproximadamente a las 0400
del 2 de abril del submarino Santa Fe, comandado por el capitán Horacio Bicaín.
“Al llegar a tierra
se adoptó un dispositivo de seguridad, ya que el enemigo que esperábamos en la
playa no daba señales de presencia. Cuando estábamos por ingresar a Puerto Argentino / Port
Stanley recibimos fuego. La vanguardia desembarcó de sus vehículos y rechazó el
ataque obligando a los soldados británicos a retirarse”.
Pero simultáneamente
hubo un pequeño grupo de fuerzas especiales que trataba de lograr un objetivo
crucial: tomar la casa del gobernador y lograr la rendición.
“La gran dificultad
era que, según nuestra inteligencia, los británicos no se iban a rendir sin
haber sufrido o habernos causado bajas, por lo que la única solución era lograr
que se rindieran antes de que comenzara o se generalizara el combate”.
“Por eso ordené que
el grupo del capitán (Pedro) Giachino presionara al señor (Rex) Hunt
(gobernador de las islas) con el objeto de quebrar su voluntad y lograr una
rápida rendición”.
“Giachino y sus
hombres cumplieron acabadamente esa exigencia. Hicieron fuego nutrido sobre la
parte superior de las ventanas de la casa de Hunt, y en particular sobre el
despacho donde estaba el mismo Hunt, obligándolo a tirarse debajo del
escritorio”.
Conclusión
La defensa de
nuestros intereses nacionales y nuestra Soberanía Nacional, requirieron en toda
nuestra historia contemporánea de la valentía y profesionalidad de muchos
héroes, su mayoría lamentablemente son los anónimos y no conocemos sus
narraciones, por suerte unos pocos salieron a la luz con ellas, para
ilustración de la opinión pública y las nuevas generaciones.
El señor Almirante IM
Carlos Büsser es uno de nuestros héroes de la Guerra de Malvinas que siempre
deberíamos recordar; y me permito hacerlo con las conmovedoras palabras que me
hizo llegar recientemente quien reemplazara al Capitán Giachino luego de su
heroica muerte, el entonces 2do. Comandante del Batallón de Infantería de
Marina N° 1 CFIM Carlos Víctor Bulfon: “LOS FRUTOS Y LA FUERZA DE LA SANGRE
DERRAMADA 1982-2014… Con la Fuerza de la Supervivencia y el recuerdo constante
del ejemplo pasado, de los componentes, Infantes de Marina, que entregaron su
vida por el Grupo, por sus compañeros, por la IM y la Patria, en 1982… 30 años
después, decidimos juntarnos, para volver a reconocer, cual fue la Fuerza de la
llama, que ya nos había convocado, cuando la Nación, lo reclamaba en peligro.
Desde aquel momento en 2012, decidimos que seguiríamos adelante… no por el
recuerdo y homenaje a los héroes… sino por nosotros, porque lo merecemos,
porque fuimos Valientes y este es el fruto de aquella sangre derramada, por
nuestros héroes: "Soldados BIM 1″, 2014.
Vaya si lo merecen
nuestros héroes de guerra. Interpreto que fue una gran injusticia, el escarnio
que ya ancianos el Almirante Büsser y su esposa debieron soportar por el
capricho y arbitrariedad de unos pocos. También como él, otros que han servido
con honores a la Patria están en prisión, a la espera de un “Juicio” que nunca
llega y seguramente nunca va a llegar con la transparencia y objetividad que
debiera, ya que muchos de los que deberían rendir cuentas a la Justicia por su
pasado “violento” hoy se encuentran libres o en la función pública. Considero
que si la Justicia no es para todos, no es Justicia.
Señor Almirante IM
Carlos Büsser, descanse en paz. ¡Dios lo tenga a su lado!
Un
imbécil es alguien que molesta haciendo y/o diciendo tonterías.
Una persona poco inteligente, alguien a quien de ningún modo se le puede dar a
conducir algo, porque invariablemente lo va a estropear. Nunca tendrá menos pericia dirigencial, que cuando lo dirijan
imbéciles.
En
los ´70, cuando eran jóvenes, leyeron 5 libros y se sintieron semidioses.
Trajeron la violencia a un país que no sabía demasiado acerca de vivir en
permanente estado de beligerancia interna. Trajeron bombas, asesinatos y
secuestros extorsivos. Trajeron la barbarie con un endeble y cambiante discurso
político detrás. Y pretendieron que un
pueblo de gente tranquila y trabajadora, gente amante de la familia y de la
amistad, gente con problemas pero civilizada, debiera adscribir a su demencial
propuesta.
35 años después
retornaron, ya viejos, y tuvieron la astucia de hacerse con el poder. Otra vez
exhibieron un discurso endeble y cambiante, pero continuaron enamorados de la
violencia. Se pelearon con todos, se burlaron de todos, desafiaron a todos.
Tuvieron una etiqueta despectiva para cada uno de los que pensaban distinto a
ellos. Consiguieron dividir y subdividir
a la sociedad como nadie lo había hecho antes. Y se pasaron una década
destilando e inoculando el veneno de su odio.
Les liberaron calles,
plazas y rutas a los criminales, y dijeron que la violencia y el crimen eran,
apenas, sensaciones. Hablaron de
garantismo y usaron los derechos humanos para terminar haciendo que el decente
fuera culpable de la criminalidad de los asesinos.
Demostraron una
ignorancia supina para el asunto de gobernar una nación, y terminaron tratando
de llevarse por delante a la república, para instaurar un régimen corrupto
desde la piel al tuétano, donde gobernaron mediante los más absurdos y vulgares
personajes que la historia recuerde.
Los
soberbios imbéciles nos convirtieron el país en un sitio verdaderamente de
mierda, y hay que decirlo con claridad. Nos volvieron la letrina del mundo.
Damos vergüenza.
Si hacemos un balance
de los últimos 50 años de esta Argentina, las
dos décadas más violentas y siniestras las protagonizaron los mismos imbéciles.
Porque, de jóvenes,
cuando eran imberbes, la soberbia de creerse superiores al resto los llevó al
desastre, y porque cuando regresaron mostraron que el tiempo les pasó en vano.
Porque no habían aprendido absolutamente nada.
No
sé hasta cuando la Argentina deberá soportar la desgracia de padecer a estos
tipos siniestros. No tengo idea. No consigo comprender
cómo es posible que haya alguien que vaya y los vote, honestamente, me resulta
inverosímil. No sé tampoco cómo terminará este asunto de los imbéciles con
poder. Supongo, igual que usted, que esto terminará inevitablemente mal.
Lo
único que sí sé es que, de la forma en que ellos lo plantean, es absolutamente
imposible vivir en paz. Es genuinamente utópico pensar
en algo diferente al caos generalizado, porque esa es su naturaleza, así es
como ellos son, y esas son las aguas que mejor navegan.
Aman
la crispación y la pelea. Son profesionales de la exasperación.
Llevan todo al límite
de quiebre; desde la convivencia, a la ley; desde la política más básica y
elemental, a las relaciones internacionales. Rompen todo; son elefantes ciegos
corriendo dentro del Emporio de la Loza...
Uno se sigue
preguntando si verdaderamente hacía falta tener que pasar por esto, para
aprender cuales son todas las cosas que no se deben hacer.
Nunca menos respeto,
nunca menos diálogo, nunca menos humildad, nunca menos tolerancia, nunca menos
capacidad, nunca menos unión, nunca menos ejemplo, nunca menos pericia, nunca
menos legalidad, nunca menos equilibrio, nunca menos verdad, nunca menos educación,
nunca menos solidaridad, nunca menos justicia, nunca menos país.